Llega el gran día. La fecha más especial de tu vida. Y quieres que cada momento quede guardado para siempre. Por eso no te la puedes jugar con el fotógrafo de tu boda. Pero… ¿cómo elegir el mejor para ti? A continuación encontrarás algunas recomendaciones para que las fotos de tu boda sean absolutamente perfectas:
El estilo del fotógrafo
Hay muchos estilos diferentes en la fotografía de boda. Por es importante que, en primer lugar, encuentres un fotógrafo del que te guste su estilo. Mira a fondo la web del fotógrafo y piensa si te gustan ese tipo de fotos. Ten en cuenta que las fotos que veas en la web del fotógrafo serán similares a las que tengas de tu boda. Así que lo principal es que te asegures de que el estilo del fotógrafo encaja perfectamente contigo. Y mi recomendación es que pienses un poco qué tipo de fotos te seguirán gustando dentro de 5, 10 o 15 años. Porque muchos estilos son sólo modas pasajeras (por ejemplo, ahora está de moda el estilo vintage, con tonos desaturados y aspecto de fotografía film). Pero lo que os es una moda, dentro de un par de años cansa y se queda totalmente desfasado. En mi opinión, las mejores fotografías son las que tienen un estilo visual moderno y un procesado de máxima calidad, respetando los colores originales y con buena definición. De hecho, los mejores fotógrafos del mundo son de ese estilo de fotos, no hacen fotos boho chic ni vintage porque saben que esas modas pasan rápido.
Que te enseñe una boda entera.
Es fácil conseguir 1 foto buena de una boda. Y si has hecho 20 bodas, ya tienes 20 fotos buenas. Pero tú no quieres sólo una foto de tu boda, ¿verdad? Pide que te enseñen todas las fotos de una sóla boda. Un álbum, por ejemplo. Ahí podrás ver qué tal es ese fotógrafo en general, no sólo por una foto buena. Y si sabe contar la historia de una boda en general, no sólo hacer una foto artística sin más.
La calidad del álbum
Álbumes fotográficos hay de muchos tipos… y de muchas calidades. Siempre puedes hacerte un álbum tú misma, del tipo Hoffman u otro de estos que se pueden online. Son álbumes que no están mal, aunque yo los usaría para cosas más del día a día. El álbum de tu boda debería tener la calidad suficiente como para que dure muchos, muchos años. Y no sólo es un tema de calidad fotográfica, sino que también debería lucir de un modo especial. Ahí es donde entran los álbumes profesionales. Y curiosamente… no todos los fotógrafos ofrecen álbumes de la mejor calidad. ¿Por qué? Muy sencillo, muchos ahorran en el álbum para poder ganar un poco más con la boda. Por eso es importante siempre comparar qué te ofrece cada fotógrafo… ¡en detalle! No cuesta lo mismo un álbum de 30x25cm que uno de 40x30cm, por ejemplo. Ni tampoco cuesta lo mismo si tiene 30 páginas, que si tiene 40, 50 ó 60 páginas. Para que te hagas una idea, producir un buen álbum profesional suele costar a partir de 300 euros, así que si alguien ofrece fotos, preboda y álbum por menos de 1000 euros y con iva incluido… por algún lado está recortando, ¿no crees? Así que ya sabes, siempre que puedas, pide que te enseñen el álbum que ofrecen antes de decidirte por tu fotógrafo.
El factor humano.
La relación que establezcas con el fotógrafo marcará el resultado final. Habla con él todo lo que puedas y así os sentiréis más cómodos. Al fin y al cabo es la única persona que te va a acompañar durante todo el día de tu boda, desde que empiezas a arreglarte por la mañana hasta las horas locas de la fiesta. Y es que en la mayoría de ocasiones, un buen fotógrafo podrá convertirse en un gran amigo. Así que si conectas con él, todo irá mucho mejor.
Haz una reunión antes de la boda en la que habléis sobre las fotos clave.
Algunos novios le dan mucha importancia a que en las fotos de la boda salgan absolutamente todos los invitados. Otros prefieren centrarse en los momentos clave del evento. Tal vez a ti lo que te preocupe es que sobre todo tus padres salgan en muchas fotos… Pregunta a tu fotógrafo si podéis hacer una reunión en la que preparéis las fotos imprescindibles que queréis tener en vuestro álbum. Así os ahorrareis posibles sorpresas desagradables porque la foto que tú dabas por hecho que haría el fotógrafo resulta que no la hizo. En definitiva, intenta crear un buen flujo de comunicación. Lo hará todo más fácil. Y te asegurarás de que el fotógrafo elegido están en sintonia con lo que tú esperas de él.
El precio pasa, las fotos permanecen.
Cuando contrates un fotógrafo, asegúrate de qué es lo que incluye en su oferta. Lo normal es que los precios que se ofertan sean sólo por hacer las fotos. Y luego seguramente tendrás que sumar el coste del álbum (que variará mucho según el número de páginas que quieres que tenga, si las tapas son de piel o de otro material, etc.), si quieres hacer una sesión pre-boda o post-boda, si vais a hacer un mini-álbum para los padres, si quieres que te pasen todas las fotos de la boda (los brutos) o si te vale con las fotos finales que vayan en el álbum… Mil opciones y todas válidas. Lo importante es que cuando compares precios tengas en cuenta lo que ofrecen unos y otros por el mismo precio. Aunque mi consejo es que, sobre todo, elijas el fotógrafo porque te gusten sus fotos. Al fin y al cabo, las fotos son lo único que permanece una vez pasada la boda (junto con los anillos) y son las encargadas de que puedas revivir cada momento y volver a emocionarte como el día de la boda. Del precio ya no te acordarás al cabo de unos meses. Pero las fotos estarán ahí para siempre.
Por último, si ahora mismo estás buscando un fotógrafo para tu boda escríbeme un email, nos tomamos un café y me contáis cómo será vuestro gran día. ¡Será un placer conoceros!
Artículo muy interesante, ¡enhorabuena!